Aún recuerdo aquella tormentosa noche, estabamos los dos sentados en el suelo, él entremis brazos con la mirada perdida en el techo, bajé mi mano para tocar aquella alfombra de terciopelo rojo que me regaló por mi cumpleaños pero mis dedos dieron con otra cosa, intenté ver que era lo que ocurría pero la luz se había ido unos minutos antes y no conseguía ver nada.
Seguí pues abrazándole notando como lloraba, pues sus lágrimas le corrían por el costado, súbitamente un rayo iluminó la sala y pude ver en ese instante su sonrisa y sus ojos azules mirándome, no había lágrimas en su rostro, me quedé extrañada...
Pasaron segundos pero me parecieron siglos antes de que otro rayo más iluminase con más ahinco lo que estaba a mi alrededor: él mirándome con ojos lastimeros, con su siempre radiante sonrisa en el rostro, su camisa negra oscurecida por la sangre que emanaba de su costado llegando hasta la alfombra, rodeándome como si cada célula de su cuerpo ansiase eso más que nada, era feliz, lo tenía conmigo, me abrazaba, me sonreía... Aquello solo duró un relámpago más cuando sus ojos se apagaron y todo su cuerpo y sangre caía al suelo con un ruido ensordecedor, pero a la vez bonito mientras sus labios pronunciaban sus últimas palabras "Gracias"

Le abracé con las fuerzas que me quedaban, lo tendí boca arriba y le coloqué los brazos en cruz sobre el pecho, me quedé observándole un minuto más y salí por la puerta de la sala.

Días más tarde, su cuerpo desapareció, junto conmigo, la gente me dice asesina y me señala por la calle mientras mi vida continua como siempre, la policía me dejó en libertad al hallar un sobre en el piano que solía tocar, y que aún, al llegar a casa me siento delante del instrumento, cierro los ojos y comienza a sonar aquella preciosa melodía que me tocaba las noches más tristes y que me animaban el corazón.

Sigo investigando la razón por la cual se quitó la vida aquella noche tormentosa, pero mi corazón me dice que cuando halle la respuesta será cuando vuelva a abrazarle una vez más y para toda la eternidad.